Aprobado el presupuesto para la construcción de un nuevo laboratorio en el Hospital Carlos III de Madrid
En el 30% de los casos de enfermedad cardiovascular, la primera manifestación que vive el paciente es la muerte súbita, explica en conversación telefónica el cardiólogo Valentín Fuster, de 67 años, premio Príncipe de Asturias de Investigación Científica y Técnica y director del Instituto Cardiovascular del Hospital Monte Sinaí de Nueva York.
Por eso se ha embarcado, junto a la Comunidad de Madrid y la Fundación Centro Nacional de Investigación Cardiovascular Carlos III (CNIC), que también preside él, en un proyecto para dirigir el nuevo laboratorio que construirá el hospital Carlos III. Para esta infraestructura el Gobierno de Esperanza Aguirre aprobó ayer una dotación de 2,59 millones de euros.
Los programas que dirigirá Fuster están destinados a la investigación con seres humanos. "Vamos a intentar identificar con tecnología de imagen quiénes están en una fase de la enfermedad que se denomina silenciosa", explica el cardiólogo. "El objetivo es que, si usted es jugador de un equipo y está desarrollando la enfermedad, podamos detectarla a tiempo". Es decir, que esperan transferir los conocimientos adquiridos en la investigación biomédica a la práctica clínica diaria del sistema sanitario madrileño.Dotado de un presupuesto de 2,59 millones de euros, el nuevo laboratorio dirigido por el cardiólogo Valentín Fuster, premio Príncipe de Asturias de Investigación Científica y Técnica, realizará estudios con el fin de identificar a pacientes que pueden sufrir muerte súbita Esta es una tecnología de investigación de primer nivel mundial, muy importante para España, destacó Fuster, que explicó que, aunque el proyecto lo financia en parte la Comunidad de Madrid, serán objeto de la investigación "individuos que vendrán de toda España" y, por tanto, se aplicará en todo el país.
El cardiólogo explicó además que se trata de una oportunidad para la formación de profesionales jóvenes, que podrán acceder a tecnología punta. "Estamos entrenando a una decena de jóvenes investigadores para que puedan dirigir ellos los programas", explicó Fuster.
El laboratorio
En el nuevo laboratorio del hospital Carlos III se instalarán, entre otros dispositivos, un equipo que combina resonancia magnética y PET (tomografía por emisión de positrones), un escáner TAC (tomografía axial computarizada) multidetector, equipos de cardiografía con sondas transtoráficas y vasculares y cintas de ergometría para pruebas de estrés combinadas con técnicas de imagen.
Por eso se ha embarcado, junto a la Comunidad de Madrid y la Fundación Centro Nacional de Investigación Cardiovascular Carlos III (CNIC), que también preside él, en un proyecto para dirigir el nuevo laboratorio que construirá el hospital Carlos III. Para esta infraestructura el Gobierno de Esperanza Aguirre aprobó ayer una dotación de 2,59 millones de euros.
Los programas que dirigirá Fuster están destinados a la investigación con seres humanos. "Vamos a intentar identificar con tecnología de imagen quiénes están en una fase de la enfermedad que se denomina silenciosa", explica el cardiólogo. "El objetivo es que, si usted es jugador de un equipo y está desarrollando la enfermedad, podamos detectarla a tiempo". Es decir, que esperan transferir los conocimientos adquiridos en la investigación biomédica a la práctica clínica diaria del sistema sanitario madrileño.Dotado de un presupuesto de 2,59 millones de euros, el nuevo laboratorio dirigido por el cardiólogo Valentín Fuster, premio Príncipe de Asturias de Investigación Científica y Técnica, realizará estudios con el fin de identificar a pacientes que pueden sufrir muerte súbita Esta es una tecnología de investigación de primer nivel mundial, muy importante para España, destacó Fuster, que explicó que, aunque el proyecto lo financia en parte la Comunidad de Madrid, serán objeto de la investigación "individuos que vendrán de toda España" y, por tanto, se aplicará en todo el país.
El cardiólogo explicó además que se trata de una oportunidad para la formación de profesionales jóvenes, que podrán acceder a tecnología punta. "Estamos entrenando a una decena de jóvenes investigadores para que puedan dirigir ellos los programas", explicó Fuster.
El laboratorio
En el nuevo laboratorio del hospital Carlos III se instalarán, entre otros dispositivos, un equipo que combina resonancia magnética y PET (tomografía por emisión de positrones), un escáner TAC (tomografía axial computarizada) multidetector, equipos de cardiografía con sondas transtoráficas y vasculares y cintas de ergometría para pruebas de estrés combinadas con técnicas de imagen.
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