La habitación como lugar habitable
Fecha: Octubre 2018
Idioma: Castellano
Autores: Núria Garcia, Arquitecta Vitaller Arquitectura
Procedencia: Vitaller Arquitectura
Web: ver aquí
Cuando un paciente es ingresado en un hospital durante un periodo medio o largo, la habitación del hospital se convierte temporalmente en su casa. Es por eso que cuando hablamos de diseñar una habitación de un hospital, ¿por qué no deberíamos pensar en las mismas características que cuando diseñamos una vivienda? Varios estudios evidencian la relación directa que hay entre la recuperación del paciente y el entorno que lo rodea. En los últimos años está habiendo un cambio de tendencia en la arquitectura sanitaria, donde los especialistas buscan una vertiente más humana y cercana, alejándose del ambiente medicalizado.
Hay que remarcar que cuando hablamos de humanizar para mejorar la recuperación de los pacientes, no nos referimos sólo a ofrecer un mejor entorno únicamente pensando en el paciente, sino también en los profesionales que trabajan allí: diseñar para las personas, no sólo para los pacientes. Porque si el personal trabaja en condiciones óptimas, podrá asistir mejor a los pacientes. Una vez asimilada la necesidad de humanizar el entorno hospitalario, nos preguntamos cómo conseguirlo. A continuación describimos los aspectos que consideramos más relevantes:
Bienestar objetivo y subjetivo
Los materiales pueden variar la calidad de los espacios, y es por ello que para conseguir un ambiente de calidad deben ser cálidos y confortables, para que el paciente y sus familiares se sientan cómodos. Usar materiales naturales como la madera nos evoca a un hogar, espacios a los que estamos familiarizados y que nos hacen sentir seguros. El mobiliario es otro elemento fundamental conseguir esa sensación. Escoger un conjunto de muebles como un sofá-cama, una mesa auxiliar y un sillón con un estilo, color y textura menos hospitalario y que haga la misma función ayudarán exponencialmente en el ambiente de la sala.
Uno de los elementos que hacen recordar al paciente que está en una habitación de un hospital son los múltiples mecanismos que se encuentran en el cabezal de la cama. Un buen recurso es integrarlos en el revestimiento vertical, escondiéndolos visualmente. La iluminación artificial nos ayuda a ofrecer diferentes escenarios, como luz indirecta en el cabezal para tener un ambiente relajado, hasta puntos de luz puntuales y direccionados para las exploraciones médicas. También es un factor importante cuando hablamos de generar habitaciones con unas condiciones de confort prestar atención al confort acústico con la ausencia de reverberación y ruidos no deseados mediante revestimientos acústicos y pavimentos flexibles. La ventilación y la renovación del aire y el control higrotérmico de los diferentes espacios evitan situaciones malos olores, humedad y ambientes cargados.
Privacidad
Los hospitales son edificios de gran envergadura, con un número elevado de usuarios y con una actividad frenética. Esto conlleva a menudo a un ambiente agitado y estresante, nada favorable para el paciente. Es importante ofrecerle la posibilidad de tener su espacio privado, donde poder alejarse del movimiento constante de los pasillos. Es importante diseñar una habitación para pacientes donde cada zona esté claramente definida para que no interfieran con otras. En el caso de las habitaciones dobles, es un fundamental establecer un separador visual e incluso auditivo entre las dos camas. Éste puede ser móvil, pero debe existir la posibilidad de que el usuario decida cuándo ponerlo. Y no sólo se trata de establecer un separador ocasional. Cada usuario debe tener en su espacio privado sus propias pertinencias (muebles, armarios....). Debe tener la posibilidad de coger cualquier cosa del armario sin preocuparse de que debe pasar por delante de la capa de su acompañante, o incluso tener su propio sillón para cuando venga una visita a verle sin tener que pedírselo a su compañero de habitación.
Funcionalidad
Hemos mencionado anteriormente que cuando hablamos de humanizar no sólo nos referimos desde el punto de vista del paciente, sino también del personal. Los puntos anteriores deben cumplirse del mismo modo que no se pierda la funcionalidad y así asegurar una buena asistencia.En este sentido, estamos hablando de dimensionar bien las estancias, escoger materiales adecuados o estudiar los recorridos y movimientos habituales del personal para facilitar su labor. Por eso, es muy importante implicar al personal desde el inicio del proceso de desarrollo del proyecto.
Debe comprenderse la importancia que reside en la zona de alrededor de la cama, desde donde el personal trabaja.
Es por ello que debe existir espacio suficiente alrededor de la cama para que pueda rodearlo en cualquier momento. Además, deben poder transportar fácilmente herramientas médicas y maquinaria dentro y fuera de la habitación hasta el cabezal de la cama. La zona de cabecera consiste es el espacio donde se encuentran gran parte de las herramientas médicas más vitales para el cuidado del paciente como las salidas de oxígeno, y por ello es vital su acceso. Los baños son espacios utilizados por pacientes, familiares y personal asistencial. Debe ser accesible en todos los aspectos, y por eso es esencial que disponga del mobiliario auxiliar y pavimento antideslizante para reducir el riesgo de caídas.
Debe tener una superficie suficiente para poder asegurar el uso en silla de ruedas, y tener en cuenta que habitualmente los pacientes precisan de una persona para que les ayude. Con una sociedad cada vez más avanzada, la incorporación de nuevas tecnologías en hospitales y salas de pacientes puede aumentar la productividad y el proceso de curación de los pacientes si se introducen y usan correctamente. Potenciar la participación del paciente a través de una aplicación de teléfono inteligente es una forma de crear una nueva dinámica en la comunicación y educación del paciente.
La comunicación directa de paciente-enfermera a través de la pantalla mejoraría la prestación y atención del paciente, mejorando drásticamente el flujo de trabajo para las enfermeras.
Distracciones positivas
Las distracciones positivas ayudan a reducir el estrés y la ansiedad que provoca en los pacientes el entorno mecanizado de un hospital, además de reducir el consumo de los medicamentos y el tiempo de ingreso, como se demuestra en numerosas evidencias científicas que existen. El objetivo es mejorar la experiencia del entorno sanitario por parte de los usuarios. Disponer de una ventana con vistas la exterior en la habitación es un factor esencial del que nadie quiere renunciar. La luz natural tiene un efecto beneficioso sobre el bienestar de los pacientes.
Disponer de ventanas ayuda a un paciente a sentirse menos contenido y apretado, ya que la mayoría de las habitaciones tienden a ser pequeñas y con muchos equipos. El factor más influyente es no perder el círculo circadiano, el ciclo día y noche para que no pierdan la noción del tiempo. Además, la vitamina-D que aporta la luz solar fortalece los huesos. Es por eso que hay que promover al máximo la luz solar, mediante ventanas al exterior con elementos de control solar, ya sean interiores (cortinas o persianas) o exteriores (porches) para evitar deslumbramiento que puedan provocar un riesgo de caída de los pacientes. Aun así, existen unidades en que, por razones ajenas, no disponen de vistas a la naturaleza. En ese caso, colocar una imagen de gran tamaño de un espacio exterior como un prado o una arboleda como elemento decorativo desvía la mirada del usuario hacia esta y lo evoca al exterior.
Introducir arte en el proceso curativo es más que decoración. Numerosos estudios han demostrado que reduce el tiempo de hospitalización de un paciente, la presión sanguínea, la frecuencia cardiaca e incluso reducir la toma de medicamentos con analgésicos. Incorporar plantas en las habitaciones añade un punto de naturaleza en el ambiente y decoración, además de producir oxígeno que da al paciente aire fresco. Todos estos elementos paisajísticos, artísticos y naturales son una manera sana y natural de incorporar elementos en una habitación que hace el espacio más hogareño y menos institucional.
Con la finalidad de mejorar la experiencia del paciente y su recuperación, la arquitectura sanitaria debe ir cada vez más hacia la humanización. Hoy en día los avances tecnológicos y científicos nos permiten experimentar con nuevos materiales y sistemas que ayudan a alejarse del carácter hospitalario, fomentar la inclusión social de los usuarios y crear un ambiente estimulante y curativo. Con el tiempo, tendremos todavía más evidencia de la buena recepción del paciente frente a esas mejoras, y nos empujará a seguir mejorando en el diseño.
Para poder escribir un comentario debe iniciar sesión o darse de alta en el portal.