Cada vez más los centros médicos requieren de integraciones audiovisuales, ya sea por su propia actividad asistencial o porque tienen una componente divulgativa para entornos de formación, investigación, congresos, etc.  Una integración con tecnología audiovisual dota a los centros de recursos que aportan valor a la actividad asistencial.

Cada proyecto necesita del sistema de integración más conveniente y son los profesionales que se dedican a realizar integraciones audiovisuales los que deben asesorar a los clientes sobre el tipo de solución más adecuada para su proyecto. No todos los proyectos son iguales, ni tienen los mismos requerimientos, funcionalidades o presupuesto. 

Es importante que los centros tengan una idea clara de hacia donde van sus integraciones audiovisuales. Durante muchos años, las integraciones se han efectuado en los centros de una forma muy independiente para cada servicio médico, sin una visión global que permitiera al centro potenciar sus recursos. Evidentemente los requerimientos y funcionalidades han cambio mucho en los últimos años. Hoy en día los audiovisuales ya son una partida más de los presupuestos de equipamiento a incorporar en las instalaciones médicas.

La creación de un plan director audiovisual ayudará al centro a desarrollar una infraestructura audiovisual que permita establecer una dirección tecnológica y después a preguntarse cómo realizar la gestión de todos los nuevos contenidos audiovisuales que se generan, la importancia de estos y qué plataforma de gestión de contenido audiovisual se adapta mejor a los nuevos requerimientos.

Está claro que no todos los centros son iguales ni tienen las mismas necesidades, pero se hace necesario que todos y cada uno de ellos se acaben preguntando, ¿hacia dónde van nuestros audiovisuales?

Cada vez más, los departamentos de Infraestructuras, Comunicación, IT y Audiovisuales de los centros están viendo que es importante tener una empresa de integración audiovisual al lado, que les ayude a afrontar todos estos nuevos retos.

Un sistema de integración audiovisual dispone de una arquitectura formada por los siguientes elementos principales: el sistema de trasmisión-enrutamiento de señales, el equipamiento de video y audio y la plataforma de control del sistema.

El sistema de transmisión-enrutamiento es la primera capa que se debe decidir a la hora de diseñar la arquitectura del sistema de integración. Actualmente, las integraciones con sistemas de transmisión de video IP han cogido mucha relevancia, pero dependiendo del tipo de proyecto, un sistema convencional de matriz de enrutamiento puede ser suficiente. Es en cada proyecto donde el análisis de requerimientos y funcionalidades junto al presupuesto nos acabará derivando a qué tipo de sistema es necesario.

Aparte de las matrices de conmutación utilizadas durante muchos años en estos entornos, existen en el mercado procesadores de imagen que permiten realizar muchos de los principales procesos que hoy en día se requieren en una integración convencional en un solo equipo. Estos equipos que aceptan señales hasta 4K, son modulares y disponen de diferentes tipos de conexiones. Disponen de escalado de señal, layouts de multivisión o incluso salidas de streaming. Para muchos entornos, este tipo de equipos, junto a otros periféricos, pueden ser una buena solución para una integración más convencional.  

Los sistemas de transmisión de video IP tienen su sentido cuando se realiza una integración donde muchos espacios deben estar interconectados, ya sea entre sí o entre otros espacios del propio centro, así como para integraciones donde hay un gran número de entradas y salidas. Es en estos proyectos donde los sistemas convencionales de matrices y de transmisión, quedan a un lado delante de este tipo de tecnología. Evidentemente, es en proyectos de nueva creación que este modelo de sistemas se está implementando cada vez más, ya que la infraestructura de red del centro, se diseña teniendo en cuenta los requerimientos de estos sistemas.

Los sistemas de video IP que se están implementando son los denominados sistemas sin compresión cero latencia, que permiten transmitir señales de vídeo de máxima calidad hasta 4K 60Hz a 4:4:4 y que sus codificadores y decodificadores con grado médico, pueden funcionar en red con fibra óptica, red Ethernet 10Gbe o incluso redes mixtas. Hay sistemas de video IP que funcionan a 1GB pensados para otro tipo de entornos, donde las señales estarán comprimidas y que habrá latencia en la transmisión. Los sistemas de video IP que se están implementando, incorporan funcionalidades como layouts de multivisión, creación de videowalls, gestión de audio, redundancia en plataforma de control, así como integración mediante API con el sistema de control que se quiera implementar.

Algunos fabricantes de sistemas de transmisión de video IP utilizan su propio protocolo IP, lo que conlleva que estos sistemas solo funcionarán con sus propios equipos. Este es un punto importante a tener en cuenta a la hora de escoger que sistema utilizar, ya que siempre será preferible disponer de una solución que use un protocolo estándar que permita instalar equipos de diferentes fabricantes dentro de la misma integración.  

Uno de los equipamientos que forman parte de cualquier sistema de integración son las cámaras robóticas denominadas PTZ, que permiten el control remoto del movimiento horizontal, vertical y zoom. Dependiendo del tipo de integración que se requiera se pueden instalar una o más cámaras, con la intención de disponer de una imagen general del quirófano, así como otras imágenes más cercanas al motivo de interés. Estas cámaras pueden disponer formatos de salida en HD o 4K así como ópticas de mucha calidad. Dependiendo de la iluminación que disponga el espacio, conceptos como la iluminación mínima y la apertura de diafragma de la cámara, ayudarán a obtener señales de más o menos calidad.

Los monitores de video son una parte importante en cualquier integración. Cada instalación requerirá de diferentes monitores donde visualizar señales, dependiendo de las necesidades del servicio médico y del tipo de integración que se requiera. En aquellas instalaciones donde se requieran comunicaciones externas, será necesario disponer de un monitor destinado al retorno visual de estas comunicaciones.