Maria Mercè Batlle es la candidatura ganadora del Premi Solidaritat 2022, que concede desde el 1987 el Institut de Drets Humans de Catalunya-IDHC a personas y entidades destacadas por su trabajo en favor de los derechos humanos. El jurado del premio, formado por representantes de organizaciones sociales y activistas de derechos humanos, reconoce en esta edición el compromiso y entrega de una persona con una larga y destacada trayectoria dedicada a los derechos de las personas con discapacidad, especialmente con parálisis cerebral.

Maria Mercè Batlle ha sido pionera en la defensa de los derechos y la integración de las personas con discapacidad, visibilizando una realidad hace años muy olvidada. Ha estado implicada desde sus inicios en la Asociación AREMI, de la que es presidenta desde 1996, surgida a la iniciativa de un grupo de padres y madres con hijos o hijas afectados de parálisis cerebral y otras discapacidades, que decidieron crear un centro adecuado a las necesidades que presentan estos niños y niñas, dada la carencia de centros especializados en Lleida y provincia,

El jurado del premio ha querido destacar su entrega y dedicación al colectivo que representa desde los diferentes espacios en donde ejerce su activismo: la Asociación AREMI, la Federación de Entidades de Parálisis Cerebral FEPCCAT, la COCARMI y la Confederación ASPACE.

Para Montse Tafalla, presidenta de la IDHC, “Mercè encarna un liderazgo en primera persona, caracterizado por el activismo firme, convencido e incansable a pesar de todos los obstáculos. Su trabajo ha sido decisivo para poner en primera línea las necesidades de las personas con parálisis cerebral y discapacidades similares, las de sus familias y las de los profesionales de atención directa”.

El periódico Malarrassa ha sido también reconocido con la mención especial medios de comunicación por su compromiso con los derechos humanos y su contribución a las luchas sociales de la ciudad Terrassa. Malarrassa es un medio local de distribución gratuita, nacido con la voluntad de servir de instrumento a las entidades y movimientos de la ciudad, ejerciendo un periodismo crítico e independiente, fundamentado en la investigación y los datos sobre la realidad más próxima. En palabras de Montse Tafalla “medios como Malarrassa son esenciales para garantizar el derecho a la información y la participación de la ciudadanía.”