Fecha: 13/01/2019
Idioma: Inglés
Procedencia: 60 Minutes
Web: ver aquí  

A la edad de 45 años, Chris Downey vivía la vida que siempre quiso. Era un arquitecto con un buen trabajo que residía en una pequeña casa a las afueras de San Francisco, estaba felizmente casado y era padre de un hijo de 10 años.

Era entrenador de un equipo de una pequeña liga y un ávido ciclista. Pero entonces, los doctores descubrieron un tumor en su cerebro. Se sometió a una cirugía que le sustrajo el tumor satisfactoriamente, pero Chris se quedó completamente ciego. 

Lo que Chris ha realizado en los 10 años desde que perdió la vista, tanto como persona como arquitecto, puede ser descrito desde un punto de vista diferente. 

Esta pequeña historia es sobre los temores y errores que se presentan al tratar de moverse por la ciudad sin poder ver, aparentemente ajeno al entorno construido y a la a gente que te rodea. Pero lo que no anticipó en esa rápida transición fue la experiencia más increíble de la yuxtaposición de su experiencia como vidente contra su experiencia como ciego, de los mismos lugares y de la misma gente en un período tan corto de tiempo.

Como arquitecto, esa yuxtaposición de la experiencia, con visión y sin ella, de los mismos lugares y de las mismas ciudades, en un período tan corto de tiempo le ha dado todo tipo de maravillosas iluminaciones de la propia ciudad. Por encima de todo, se dió cuenta de que, en realidad, las ciudades son lugares fantásticos para los ciegos. 

Y luego también le sorprendió la propensión de la ciudad por la amabilidad y el cuidado opuestos a la indiferencia o cosas peores. 

Empezó a darse cuenta de que los ciegos parecen tener una influencia positiva en la ciudad misma.

En esta charla TED TALK, Chris Downey, nos relata su experiencia para evidenciar que si pensamos las ciudades para las personas ciegas, las haremos más incluyentes, más equitativas y más justas. Haremos espacios y ciudades para todas las personas.