El aumento continuado en el uso de Oxigenoterapia de Alto Flujo* de soporte respiratorio no invasivo, durante la pandemia por Covid-19, unido al incremento de la actividad experimentada en los hospitales por las sucesivas olas de la enfermedad, está sometiendo a un estrés elevado a las instalaciones de gases medicinales de muchos centros sanitarios.

¿Cómo podemos ayudar a los Hospitales para combatir el COVID-19 desde la red de oxígeno?

Consumir oxígeno a alto flujo (60l/min) en lugar de los flujos habituales en oxigenoterapias tradicionales (menores de 15l/min), tiene consecuencias en dicha red, dependiendo su impacto de si ésta es de simple o doble etapa de regulación de presiones:

Una red de simple etapa de regulación de un servicio hospitalario con una tubería de sección 15mm, tendría teóricamente la capacidad de suministrar a 5 bar de presión caudal suficiente para 9 pacientes. Si dicha red alimenta más puestos que requieren oxígeno, no será capaz de suministrar el caudal requerido sin comprometer el resto de la red.

Por su parte, si dicha red es de doble etapa de regulación diseñada acorde a norma, con una presión de la red primaria de 9 bar y presión de suministro de 5 bar, con las mismas secciones (15mm), dicha red primaria podrá suministrar oxígeno a alto flujo a 15 pacientes, y ello no implicará que el resto de la instalación se vea comprometido, pudiendo el hospital continuar con su actividad habitual.

Con una red de doble etapa de regulación de unas características como las descritas, la red primaria puede suministrar oxígeno de alto flujo a un 66% más de pacientes que con una de simple etapa de regulación, garantizando así la continuidad de la actividad hospitalaria en lo que a gases medicinales se refiere.

Air Liquide Healthcare apuesta por los sistemas de gases medicinales canalizados de doble regulación, los cuales aumentan las capacidades de presión y caudales de suministro, traduciéndose esto en seguridad para clientes y pacientes.