La CE ha instado a España y al resto de países de la UE a reforzar la eficacia de los sistemas de salud públicos, invitándoles a aprovechar las ayudas europeas como los fondos estructuras para reformar los sistemas de salud sometidos bajo presión por el incremento de los costes y la reducción de los presupuestos por la coyuntura económica.

 

De este modo, el ejecutivo europeo ha recomendado a sus Estados que mejoren la planificación de la fuerza laboral sanitaria así como una utilización más eficaz de los medicamentos. La mayoría de recomendaciones se centran en reforzar y mejorar la sostenibilidad desde el punto de vista del coste sanitario, reformas en el sector hospitalario y en los precios de los servicios sanitarios así como una mejora en el acceso a todos estos servicios.

El Ejecutivo comunitario ha recomendado a los Estados miembros promover evaluaciones de rendimiento para medir resultados pero garantizando la seguridad y calidad de los servicios para los pacientes.