Generalitat de Cataluña y Ayuntamiento de Barcelona implantarán en el 2018 la tecnología BIM (Building Information Modelling) en las obras públicas de nueva construcción de más de 2 millones de euros. El acuerdo se presentó el pasado viernes, en la clausura de la primera cumbre europea sobre estas herramientas tecnológicas, que permiten reducir un 20% los costes de la construcción y cumplir con los plazos de ejecución, un encuentro organizado por el Colegio de Aparejadores de Barcelona (CAATEEB) y la BIM Academy.

 

Generalitat y Ayuntamiento crearán un grupo de trabajo con todos los agentes del ciclo de la edificación para consensuar en 2017 los estándares y protocolos de la información a compartir. Los expertos señalan que estas herramientas colaborativas permiten reducir hasta un 33% los gastos de mantenimiento de edificios a lo largo de su vida, un 40% los riesgos generales, y aumentar la calidad general de los proyectos en más de un 50%.

 

Para María Rosa Remolà, presidenta del Colegio de Aparejadores de Barcelona (CAATEEB), "el sector de la construcción debe dejar atrás los métodos tradicionales y apostar por proyectos colaborativos y de mejora continua, para ser más eficientes en nuestro trabajo diario". "Debemos avanzar hacia la industrialización de la construcción", sentenció Remolà en el acto de clausura.

 

Ignasi Pérez Arnal, director de BIM Academy, destacó que "la integración de los sistemas BIM en el ciclo de la edificación modificará de forma radical los sistemas y metodologías de trabajo", siendo imprescindibles para "el desarrollo del ejercicio profesional dentro y fuera del país". En la clausura del encuentro, que se celebró la pasada semana, Pérez Arnal anunció que la próxima edición del encuentro se celebrará en febrero de 2016.

 

Generalitat y Ayuntamiento de Barcelona crean un grupo de trabajo para impulsar esta tecnología que permiten reducir un 20% los costes.