Introducción

Los avances recientes en neurociencia tienen implicaciones significativas para el campo de la arquitectura y el diseño urbano, revelando conocimientos sobre los estados emocionales de las personas y los procesos de pensamiento a medida que exploran su entorno.

Las aplicaciones abarcan la construcción de edificios, la experiencia en la vida cotidiana y el pensamiento arquitectónico, cubriendo el espectro completo del proceso de diseño desde la ideación abstracta hasta el producto final.

En particular, la adopción de la neurotecnología aporta valor en dos etapas principales: el proceso de diseño inicial y la capacidad de respuesta del entorno construido. En ambos casos, la neurociencia cierra el bucle de retroalimentación y reduce la ambigüedad de cómo las personas responden al entorno a nivel físico y emocional.

En otras palabras, la implementación de la neurociencia proporciona una base científica para decisiones de diseño basadas en evidencia y en profundidad.

1. La neurociencia informa al diseño

Muchas personas asocian la neurociencia con un contexto puramente médico, pero el campo se ha vuelto altamente interdisciplinario con influencias que abarcan la biología, la psicología y la informática. Recientemente, los conocimientos del campo de la neurociencia han impactado una amplia gama de disciplinas, desde el marketing hasta los deportes y ahora la arquitectura.

¿Por qué el puente entre la neurociencia y la arquitectura tiene un impacto único?

A considerar las siguientes estadísticas:

• La cantidad de recursos económicos perdidos debido a los trastornos mentales comunes asciende acumulativamente a 50 millones de años, 12 millones de días y 1 billón de dólares según Chisholm et al (2016).
• Según la AEMA, el 20% de la población europea vive en zonas donde los niveles de ruido se consideran nocivos y perjudiciales para la salud, especialmente en zonas urbanas donde las personas sufren niveles excesivos de ruido de tráfico durante la noche. Para más de 20 millones de personas, el ruido del tráfico nocturno tiene un efecto perjudicial para la salud.
• Un estudio publicado mostró que la planificación del diseño ineficiente de los hospitales ha provocado la pérdida de más de $200.000 en ingresos, debido a que el personal dedica más de 4.000 horas al año a dar direcciones a pacientes y visitantes desorientados.

Estas cifras indican claramente un nexo entre el medio ambiente, la planificación arquitectónica y el bienestar, lo que sugiere que la neurotecnología podría emplearse eficazmente para diagnosticar e incluso para predecir las señales de advertencia de estrés ambiental.

Al demostrar que los factores ambientales como el ruido, la contaminación del aire, la luz solar, los colores y la forma tienen un impacto significativo en nuestros estados mentales, la neurociencia proporciona una base creíble para informar a las decisiones del diseño. La integración de estos hallazgos le da al arquitecto la capacidad de crear espacios más inclusivos, receptivos y eficientes que se alinean con el bienestar físico y mental.

Además de adoptar tecnologías y hallazgos en el campo de la investigación, el conocimiento adquirido a través de estudios de neurociencia se puede traducir para su uso en nuevas herramientas de diseño. Por ejemplo, el aparato ‘Brainspace’ es una herramienta ‘plug and play’ que recopila datos espaciales y biodatos simultáneamente, lo que permite a los diseñadores comprender el impacto que tienen los espacios físicos en las percepciones de las personas.

Estas tecnologías tienen el potencial de que las interfaces cerebro-computadora (BCI) se adopten aún más en la industria del diseño, pintando un futuro donde la adopción de la neurociencia dentro de los contextos arquitectónicos y urbanos actuales será una realidad dominante.

Finalmente, la neurociencia, por un lado, tiene el potencial de informar al diseño de su enfoque científico con la finalidad de cuantificar las huellas perceptivas y el bienestar mental, y por otro lado de permitir una interfaz directa entre los sujetos y su entorno.

2. El diseño informa a la neurociencia

El diseño impacta en el cerebro de las personas, así como en su psicología. La multiescalaridad y la multimedia del diseño crean un panorama de oportunidades para que los estudios de neurociencia se realicen fuera de un laboratorio, en entornos más naturales. El diseño, especialmente a escala arquitectónica y urbana, ofrece nuevas oportunidades para que la neurociencia y la neurotecnología comprendan los mecanismos de nuestro comportamiento en el mundo real.

Las disciplinas de diseño, y la arquitectura específicamente, podrían crear una oportunidad para plantear nuevas preguntas científicas relacionadas con la percepción espacial. Por ejemplo, la tecnología EEG móvil surgió para responder mejor a las preguntas sobre cómo responde el cerebro fuera de un laboratorio mientras se mueve por el mundo real. Esta tecnología ha sido adoptada por varios arquitectos en proyectos de investigación diseñados para evaluar el impacto del diseño espacial en un sujeto mientras éste navega por su mundo físico.

Las preguntas que les interesan a los diseñadores, como cómo crear una interacción efectiva entre humanos y edificios, cómo los entornos impactan a un individuo y cómo se percibe el espacio, son inexorablemente las mismas preguntas que hacen los neurocientíficos que estudian el comportamiento humano mientras las personas navegan por el espacio.

¿Cuánto se “siente” su edificio, Sr. Foster?

Este titular refleja una nueva perspectiva de una película conocida titulada "¿Cuánto pesa su edificio, Sr. Foster?", un documental sobre el arquitecto Norman Foster y su búsqueda interminable para entregar y expandir la arquitectura a través de las aspiraciones de diseño del siglo XX.