El Hospital de Sant Pau busca garantizar su sostenibilidad futura con nuevas vías de financiación complementarias a la actividad pública, impulsando proyectos que no descartan la vía privada y con la participación de sus profesionales sanitarios.

Esta veterana institución informa este viernes en un comunicado que "el hospital tiene capacidad para desarrollar e impulsar más actividad no pública", que actualmente representa un 3% de los ingresos, unos 8 millones de euros del total de su facturación. Por ello, sus responsables exploran actualmente nuevas vías de financiación complementarias y estudian las garantías jurídicas para ponerlas en marcha, garantizando su compatibilidad con la actividad pública que el Servicio Catalán de Salud contrata a Sant Pau cada año.

El Hospital de Sant Pau ha realizado siempre, se afirma en la nota, la actividad privada permitida por la legislación vigente, ya que trabaja para mutuas y para otros hospitales, ya sean centros del Instituto Catalán de la Salud y centros privados, y también atiende peticiones de otros países. La nueva financiación serviría para sufragar otros proyectos que hoy solo cuentan con una subvención parcial por parte de las instituciones públicas, como el Centro de Atención Comunitaria Pi i Molist, para enfermos mentales, informa el hospital.