El hospital es el edificio más complejo para un arquitecto, ya que aúna muchas necesidades distintas y hasta seis tipos de edificio: hotel, oficinas, sector ambulatorio, parte puramente técnica (quirófanos, radiología, etc. ), edificio industrial de servicios y aparcamiento.

Todo esto, agrupado y combinado, ha dado forma al modelo del que ha surgido el nuevo Hospital del Tajo, en Aranjuez (ver información relacionada), según su arquitecto Luis González Sterling, del estudio de arquitectos Argola, cuya marca está presente en los hospitales de Alcázar de San Juan, en Ciudad Real, y Fuenlabrada, en Madrid, entre otros. Pero los espacios no son lo único que hay que organizar: "Son muchos los profesionales involucrados que dependen del arquitecto, como los ingenieros, los aparejadores y los diseñadores médicos de planes funcionales".

En cualquier caso, todo hospital tiene que partir de la funcionalidad, que "se da por supuesta", pero sin olvidar que "la tipología de edificio es la más denostada respecto a su imagen pública, por lo que hay que buscar soluciones amables, bellas y sobre todo humanas.

Los dos últimos hospitales abiertos en la Comunidad de Madrid -Infanta Cristina y del Tajo- tienen la funcionalidad por bandera, pero no olvidan que hay que romper el modelo de edificio hospitalario que no destaca y que para ello se deben fomentar la belleza y la humanización
En Parla también hay una preocupación por la naturaleza gracias a "la utilización racional de los recursos naturales, reduciendo las emisiones ocasionadas por el funcionamiento del hospital, tanto en el propio centro como en los procesos de producción asociados".

A esto se une que el edificio de instalaciones esté situado al oeste del hospital, conectado mediante una galería subterránea, para "eliminar las molestias causadas por la actividad industrial y aumentar la seguridad". Otra peculiaridad de los hospitales es que se han de adaptar a un plan funcional que "varía según la comunidad autónoma en aspectos como el tipo de habitación -en Madrid individualesy el tamaño de los quirófanos, entre otras cosas", ha dicho González Sterling. Mientras que otros arquitectos de los nuevos hospitales querían haber contado con más tiempo, el diseñador del Hospital del Tajo prefería más dinero para perfeccionar los acabados y contar con más vegetación.