Introducción

La pandemia de la COVID-19 está desestabilizando nuestros sistemas de salud, económicas y sociedades. El impacto extremo de la crisis en la infraestructura sanitaria está revelando en todo el mundo todas las carencias y debilidades de los sistemas sanitarios.

El SARS-CoV-2 ha sacado a la luz los desafíos derivados de la necesidad de gestionar un aumento de nuevos pacientes manteniendo un aumento de nuevos pacientes manteniendo al mismo tiempo la continuidad de la atención al resto de pacientes. También está revelando las disparidades existentes en todo el mundo entre los diferentes sistemas de salud, en las estrategias adoptadas para hacer frente a la pandemia y en las medidas adoptadas para abordar las necesidades excepcionales de pacientes y personal.

La carga de la crisis de la COVID es masiva y abarca diferentes áreas. Si pensamos en el envejecimiento de la población, el aumento de las enfermedades crónicas, las presiones medioambientales y la evolución de la tecnología, y le sumamos la evolución de las expectativas de los pacientes, tal vez sea hora de que los hospitales también evolucionen.

A la luz de todo lo que estamos aprendiendo, ¿Qué tipo de hospital podríamos desear? ¿Cómo podemos reinventar nuestros sistemas sanitarios para que puedan gestionar las numerosas amenazas a las que nos enfrentamos además de seguir proporcionando atención a las enfermedades crónicas cada vez más comunes? ¿Qué papel podría desempeñar el futuro hospital, medicamente, por supuesto, pero también, social y ambientalmente? ¿Qué soluciones técnicas y logísticas podemos aportar para hacer frente a los retos indudablemente humanos que presenta la asistencia sanitaria?

El presente documento no pretende ofrecer un análisis en profundidad de los impactos provocados por la crisis de la COVID-19 en nuestros sistemas de salud. Sino que, intenta reunir en un único documento las enseñanzas de este año pasado, las conclusiones de los informes institucionales y las opiniones de expertos en campos relevantes, sobre lo que debería definir el hospital del futuro.

Su objetivo es precisar las apuestas y los desafíos: humanos, técnicos y logísticos, que tendrán que abordar los hospitales del futuro. También tiene como objetivo arrojar luz sobre algunas necesidades no reconocidas de pacientes y personal, y proponer algunos enfoques que conduzcan a soluciones viables.

Resulta esencial conjugar las numerosas facetas de esta cuestión para que el hospital del futuro aborde los principales desafíos sociales y de la salud a los que nos enfrentamos: la circulación de patógenos por todo el mundo, el envejecimiento de la población, el aumento de las enfermedades crónicas, y hacerlo de un modo ecológico y financieramente sostenible.

Contenido

1. Dimensión humana

• Mejorar el acceso a la atención
• Capacitar a pacientes y personal
• Mejorar la calidad de vida en instalaciones médicas

2. Retos técnicos y logísticos

• Garantizar la continuidad del servicio independientemente del contexto
• Mejora de la eficacia a través de la transformación digital
• Desarrollo sostenible en la atención sanitaria

3. Mesa redonda de expertos