Este artículo se publicó por primera vez en el Anuario AEIH 2023 y fue escrito por Luis A. Sánchez Guillén y Michael Mc Graff de Alcora Salud Ambiental Zaragoza.

La protección de superficies por recubrimiento de cobre antimicrobiano es una práctica conocida y aplicada en el control de infecciones nosocomiales. El artículo presenta un nuevo método de aplicación mucho más eficaz que el conocido de láminas adheridas, ya que incorpora las propiedades antimicrobianas al material de soporte de una manera permanente.

Cientos de estudios publicados han mostrado las cualidades del uso del cobre en los quirófanos y unidades de cuidados intensivos, de igual forma su uso en manillas y empujadores de puertas (push plate) en el resto de las instalaciones sanitarias. En pocos minutos tanto las bacterias resistentes a los medicamentos (MRSA, VRM) como el temido Sars Cov2 sucumben en su contacto con este tipo de metal.

En el congreso patrocinado por Alcora sobre esta cuestión (I Simposio Internacional sobre el cobre antimicrobiano en España, Madrid, 2019- las conferencias figuran en la Web www.Alcora.es), quedó patente la minorización del riesgo de infección que suponía la instalación de cobre antimicrobiano en hospitales, siendo prioritaria su colocación en los lugares de mayor riesgo, donde los pacientes tienen su organismo inmunodeprimido.

No hay que olvidar que, para este tipo de instalación, el cobre como biocida específico debe estar incluido en la relación TP2 registrado en la ECHA (Environmental Chemical Agency) para este uso y por ello estar controlado a través de una de las empresas que figuran en este registro de la CEE como proveedores autorizados. Este registro garantiza que se han realizado los múltiples estudios de toxicidad precisos para obtener esta condición, que entre otras cosas garantiza que el cobre usado está libre de productos tóxicos en su composición o en los elementos que permiten su adherencia a los diferentes soportes, sean metálicos o poliméricos.

Hasta ahora la única posibilidad de uso en los hospitales consistía en la aplicación de láminas adhesivas y esto, según se ha visto en los anteriores artículos publicados en este anuario (2019-2022), exige una revisión que incluye un mantenimiento proactivo, para detectar algún pequeño desprendimiento de las láminas; no hay que olvidar que el cobre como metal, puede infringir, si se desprende de su soporte, pequeñas heridas en la piel.

Manilla de puerta tratada con lámina de cobre.