El Departamento de Salut ha empezado los recortes en los hospitales catalanes - que se estiman en un 10 por ciento- por las cúpulas directivas. De entrada, se fulminan los cargos de consejero delegado y gerente del Hospital Clínic de Barcelona, que ocupaban Raimon Belenes y Anna Miró, respectivamente. Los cambios también alcanzan al Institut Català de la Salut (ICS) y al parc Mar Salut, donde el conseller Boi Ruiz dejará de ser su presidente.

La intención de Ruiz es desprenderse de ese cargo que ocupa en calidad de conseller en empresas públicas y consorcios para garantizar que estos se gestionen sin que intervenga el Departament de Salut, que es su principal comprador de servicios. Los presidentes que sustituyan a Ruiz lo serán sin remuneración.
El Clínic se queda sin consejero delegado ni gerente
Este proceso de desaparición de figuras directivas como la del consejero delegado también afectaa a los consorcios hospitalarios de Vic, Parc Taulí y al Institut d`Assistència Sanitària de Girona.

Donde el conseller Boi Ruiz no podrá dejar la presidencia es en el hospital Clínic, ya que lo impiden los estatutos. Sin embargo, su pretensión es promover también un cambio para que sea posible. En el Clínic, al suprimir los cargos de consejero delegado, gerente y subdirector general, la estructura queda reducida a un solo director general, que será Josep María Piqué, hasta ahora subdirector general, después de que el conseller haya aceptado su candidatura.
El encargo para Piqué es que nombre a una nueva junta directiva bajo estrictos criterios de austeridad. En cuanto a Raimon Belenes, el patronato del Clínic le ha propuesto como presidente de la junta ejecutiva de la fundación del hospital.