Sanidad atenderá vía telefónica e internet para descongestionar Urgencias
La Conselleria de Sanidad tiene previsto instaurar durante esta legislatura un servicio telemático de atención al paciente que reduzca las visitas a los servicios de Urgencias. Se trata de una línea directa -vía telefónica o internet- con el profesional médico, que será quien le informe sobre los síntomas que está experimentando y evaluará si éstos requieren tratamiento en el centro de salud o en el hospital.
El profesional tratará de tranquilizar al enfermo o a sus familias y acabará con la incertidumbre del «no sé qué hacer». El médico «resolverá tus dudas, pero tú seguirás siendo quien decida si quieres ir a Urgencias a las dos de la mañana», explica al respecto el director general de Evaluación, Calidad y Atención al Paciente, Ignacio Ferrer.
Y es que uno de los objetivos para los próximos años será potenciar el «Paciente 2.0». Y no sólo en Urgencias -en hospitalización domiciliaria funciona desde hace tiempo-, sino también en cuantas patologías sea viable.
Extender el autocontrol
Así, por ejemplo, hemofílicos, diabéticos, recién operados de cardiopatías o enfermos renales, podrán enviar los resultados de sus análisis domésticos o los síntomas que padezcan vía «e-mail», se valorará la gravedad de la consulta y si requiere tomar sólo una pastilla, o que pase por la consulta. De momento, esta iniciativa se llevará a cabo a través de correos electrónicos o «chat», pero el objetivo es que en el futuro se popularicen las videoconferencia.
«El paciente ha cambiado, está mejor informado sobre su patología y toma sus decisiones, así que lo que reclama ahora es mejorar su calidad de vida. Quiere ser parte activa y saber qué puede hacer desde su casa y la Administración les ha dado respuestas».
Paralelamente a este proyecto, la Conselleria de Sanidad potencia la figura del «enfermo experto», una persona que padece una patología y está formada acerca de ella, lo que le permite ayudar al resto de pacientes gracias a su experiencia y así evitar desplazamientos innecesarios a los hospitales o centros de salud.
Porque la hiperfrecuentación es el principal problema del sistema sanitario público. «Tenemos el mejor del mundo, pero si sigue así, va a la quiebra. Debemos educar a la Administración y al ciudadano».Un médico responderá a las consultas y valorará cada caso. Será el paciente quien decida si acudir o no al hospital o centro de salud
El profesional tratará de tranquilizar al enfermo o a sus familias y acabará con la incertidumbre del «no sé qué hacer». El médico «resolverá tus dudas, pero tú seguirás siendo quien decida si quieres ir a Urgencias a las dos de la mañana», explica al respecto el director general de Evaluación, Calidad y Atención al Paciente, Ignacio Ferrer.
Y es que uno de los objetivos para los próximos años será potenciar el «Paciente 2.0». Y no sólo en Urgencias -en hospitalización domiciliaria funciona desde hace tiempo-, sino también en cuantas patologías sea viable.
Extender el autocontrol
Así, por ejemplo, hemofílicos, diabéticos, recién operados de cardiopatías o enfermos renales, podrán enviar los resultados de sus análisis domésticos o los síntomas que padezcan vía «e-mail», se valorará la gravedad de la consulta y si requiere tomar sólo una pastilla, o que pase por la consulta. De momento, esta iniciativa se llevará a cabo a través de correos electrónicos o «chat», pero el objetivo es que en el futuro se popularicen las videoconferencia.
«El paciente ha cambiado, está mejor informado sobre su patología y toma sus decisiones, así que lo que reclama ahora es mejorar su calidad de vida. Quiere ser parte activa y saber qué puede hacer desde su casa y la Administración les ha dado respuestas».
Paralelamente a este proyecto, la Conselleria de Sanidad potencia la figura del «enfermo experto», una persona que padece una patología y está formada acerca de ella, lo que le permite ayudar al resto de pacientes gracias a su experiencia y así evitar desplazamientos innecesarios a los hospitales o centros de salud.
Porque la hiperfrecuentación es el principal problema del sistema sanitario público. «Tenemos el mejor del mundo, pero si sigue así, va a la quiebra. Debemos educar a la Administración y al ciudadano».Un médico responderá a las consultas y valorará cada caso. Será el paciente quien decida si acudir o no al hospital o centro de salud
Para poder escribir un comentario debe iniciar sesión o darse de alta en el portal.