El proyecto, que finaliza en enero, es financiado por el Fondo de Investigación en Salud (FONIS) y está a cargo de un grupo multidisciplinario de investigadores de las facultades de Ciencias de la Salud y Ciencias Empresariales de la Universidad de Talca y directivos de unidades de cuidados intensivos de ambos centros asistenciales.

La directora del proyecto, Sandra Alvear, indicó que la iniciativa surgió de la preocupación por contribuir al mejoramiento de la gestión de los hospitales públicos, los que, a su juicio, “son las organizaciones más complejas que la sociedad puede tener”.

Los resultados parciales del estudio fueron dados a conocer en un seminario, que se efectuó en el auditorio de la FACE y al que asistieron directivos de hospitales ubicados entre las regiones de O’Higgins y Araucanía. “El objetivo era generar conciencia sobre la importancia que hoy tienen los costos en el rol de los hospitales y la evaluación de su gestión y paralelamente difundir la metodología diseñada (para el cálculo de los costos), que es perfectamente transferible a otras instituciones”, señaló.Sandra Alvear precisó que se aspira a provocar un cambio en la cultura organizacional de la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI), que mejore la calidad, la gestión y determine un costo por patología. “Por eso clasificamos a los pacientes por patologías séptico, cardiovasculares, respiratorio, trauma, renales, entre otras”, dijo.Destacó también que las únicas unidades de cuidados intensivos de hospitales públicos que tienen este nivel de datos son hasta ahora las de Talca y Curicó, lo que les valió un premio en el Congreso Chileno de Medicina Intensiva

.Respecto al problema de costos, indicó que el arancel de Fonasa, establecido en aproximadamente 192 mil pesos, no se está utilizando en transferencias presupuestarias debido a que no representa los desembolsos reales de las instituciones, que asciende a alrededor de 400 mil pesos por día cama. “Se critica a los hospitales por la mala gestión y se dice que todos los años están aumentando su nivel de endeudamiento. En mi opinión, se puede mejorar la gestión de los hospitales, sobre todo los sistemas de información. El tema es que tenemos una diferencia de sobre 600 millones de pesos de déficit en relación a lo que establece FONASA, entre los dos hospitales.
Sandra Alvear, directora del proyecto, explicó que los datos reales podrán demostrar la necesidad de mejorar la distribución de los recursos, "del ministerio a los distintos servicios y de los servicios a los distintos hospitales".
Eso significa que hay algo en el sistema de financiamiento en la salud pública que no está funcionando”, expresó.Con la disponibilidad de datos reales, se podrá demostrar la necesidad de mejorar la distribución de los recursos, “del ministerio a los distintos servicios y de los servicios a los distintos hospitales”, añadió.

Según manifestó Leonardo Aguirre, ejecutivo del proyecto, éste “nos entrega información valiosa para el ministerio, con la cual podemos trabajar y hacer algunas intervenciones en la gestión interna”. Indicó también que al ministerio le interesa el desarrollo de proyectos económicos en salud, área en la que hasta ahora están trabajando sólo dos universidades en el país –una en Santiago y la Universidad de Talca. “Con la Universidad de Talca hemos tenido exitosos proyectos y la idea es que se pueda instalar aquí una línea de de estudios económicos en salud”, acotó.Por su parte, el director de la UCI del Hospital de Talca, Juan Jara, valoró también los resultados del estudio debido a la escasa capacidad administrativa del establecimiento para realizar cálculos de costos reales.