BIM en el sector público hospitalario ¿Reto o utopía?
Descripción de BIM
Building Information Modeling es una metodología de trabajo basada en la digitalización y en la colaboración entre agentes a lo largo de todo el ciclo de vida de una infraestructura, desde su concepción, pasando por el proyecto, la obra, hasta la recepción del inmueble por parte del Gestor de Activos Inmobiliarios, (Facility Manager), de una edificación o infraestructura, en nuestro caso, un activo inmobiliario hospitalario.
Requiere del conocimiento y formación en tecnologías asociadas a las nuevas herramientas de diseño y su objetivo es obtener una mayor eficiencia en la inversión ya que pretende conseguir una reducción de riesgos e incertidumbres y un incremento en la calidad.
Acciones a acometer para un proceso de imlpantación BIM exitoso
La estructura de la gestión en un activo hospitalario público depende de muchos departamentos independientes (mantenimiento, ingeniería, limpieza, cocina, traslados, salud laboral, enfermería, laboratorios, residuos…), obligados a coexistir y a coordinarse entre ellos.
Una metodología de trabajo, que coordine todos estos departamentos, es primordial para el buen funcionamiento del centro. Realizar la implantación de un modelo BIM, con la digitalización y la interoperabilidad de la información que genere esa infraestructura, y que pueda ser accesible por todo el personal implicado en su gestión, es una opción muy certera. De esta manera, la información siempre será veraz y actualizada. La metodología BIM no solo consiste en la realización del modelo de la infraestructura en tres dimensiones, sino que aporta al mismo los datos de los elementos más representativos y que puedan ser parametrizables, durante todo el ciclo de vida.
Este procedimiento no sólo se puede realizar en infraestructuras de nueva construcción, siendo extensible, aunque con mucho mayor esfuerzo, a hospitales ya construidos, ya que se realiza una actualización y ordenación de los elementos existentes, y una labor de investigación e implantación de nuevos datos nunca aportados hasta el momento.
Una vez planteada la necesidad, hay que desarrollar el proceso con un Plan de Implantación BIM. El proceso se puede realizar desde el interior de la institución, con personal propio ya formado para ello, o mediante la externalización de los recursos necesarios, como consultorías externas.
Quizás el método ideal sea uno mixto, en el que en una edad temprana del proceso se precisa ayuda de agentes externos, para apoyar y formar a las personas que van a dirigir el cambio en la organización, hasta que sean capaces de comandarlo ellos mismos.
Sea cual sea el método elegido, el Plan de Implantación BIM, debe identificar los siguientes parámetros: objetivos; personas; recursos necesarios informáticos, hardware, software, comunicaciones y redes; y procedimientos.
Es primordial analizar los objetivos que se quieren conseguir con esta implantación y los modelos que se quieren gestionar (gestión de los espacios, gestión de equipamientos electromédicos y sus legalizaciones, gestión de instalaciones y sus legalizaciones, control remoto de las instalaciones…) No consiste en implantarlo en todos los ámbitos, esa sería una tarea faraónica, sino priorizar sobre los más importantes.
Una vez estos objetivos están marcados, hay que identificar y describir los procedimientos que son necesarios para llevarlos a cabo.
En cualquier procedimiento a implantar habría que estudiar estos ámbitos:
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