Los hospitales concertados están incrementando la oferta de servicios privados para tener más ingresos en un momento de recortes en los presupuestos públicos. Cenas de gala, conciertos solidarios, carreras... cualquier actividad sirve para recaudar fondos para hacer investigación o poder sufragar la actividad no asistencial, como por ejemplo los pallasos de hospital.

Algunas actividades hace años que se celebran, pero otras son nuevas y algunas han generado polémica, como la opción de poderse operar antes contratando un servicio privado para salir de la lista de espera pública.

El Hospital de Sant Joan de Déu, por ejemplo, ha colgado en su web un video promocional en ruso, que se traducirá a diferentes idiomas para atraer pacientes del extranjero. La gran mayoría de enfermos vienen a través del CatSalut y seguirá siendo así, aseguran desde el centro, que desde 1995 puede hacer actividad privada al ser concertado.

 

`Crowdfunding` científico

En el caso de Sant Joan de Déu no es tanto por buscar nuevos ingresos que compensen los recortes, sino porque la natalidad ha bajado mucho y hay menos niños ingresados. Buscan fondos para poder mantener la actividad no asistencial, como los pallasos de hospital o la investigación.

El próximo lunes comenzará a buscar dinero para investigar el síndrome de Lowe a través de la primera plataforma de crowfunding científico (Founds for Research, F4R).

Por su parte, el Vall d`Hebron Institut de Recerca (VHIR) también ha puesto en marcha hace unos meses una web de micromecenazgo (www.faigrecerca.org). Otro ejemplo: la Fundació Lluita contra la Sida busca tres millones de euros para que los investigadores del Hospital Germans Trias i Pujol de Badalona puedan seguir trabajando en una posible cura del VIH.

 

Intentan compensar la caída de ingresos buscando clientes en el extranjero. También lanzan campañas de micromecenazgo y pago por operaciones. El personal sanitario volverá a movilizarse la próxima semana.

Potenciar la privada

Otros centros cuentan con una parte privada, como el Hospital Clínic (Barnaclínic) y el mismo Sant Pau (la Fundació Puigvert). En el Barnaclínic, donde fue operado el rey Juan Carlos, ofrecen servicios con los profesionales del Clínic, pero con la rapidez y las comodidades de quién es tratado pagando el 100%.

La Patronal d`Hospitals Concertats defiende que esta oferta privada en centros que operan para la pública ayuda a gestionar las listas de espera, ya que, si un enfermo sale para operarse pagando, beneficia que otro se pueda operar antes por el sistema público.

La Associació d`Entitats Sanitàries i Socials ha notado una pequeña tendencia al alza de las actuaciones para buscar fondos privados por bien que continúan dependiendo del Servei Català de la Salut (CatSalut).

Los hay, en cambio, que no salen. En el caso del hospital de Sant Pau, con un déficit de 50 millones de euros para las presuntas irregularidades cometidas por los antiguos responsables. Esta semana ha pedido a la conselleria de Justícia que lo intervenga temporalmente para garantizar su viabilidad.

Por lo que hace al Govern, ya ha anunciado nuevos recortes y el personal sanitario se volverá a movilizar la próxima semana. El miércoles lo harán los trabajadores de la Vall d`Hebron, Can Ruti, Bellvitge y Viladecans, y el jueves, ante la sede del ICS.