Los expertos coinciden: el Sistema Nacional de Salud (SNS) necesita nuevas reglas y prácticas que encaren un futuro que se presenta complicado.

Se acerca el final de un año marcado por unos ajustes destinados a garantizar la sostenibilidad del sistema, entre los que se encuentra la instauración de un nuevo copago hospitalario, el polémico euro por receta –suspendido de forma cautelar por el Constitucional– o la externalización de varios hospitales en la Comunidad de Madrid. Sin embargo, los expertos que forman la Asociación de Economía de la Salud (AES) tienen otras 166 propuestas para el Gobierno en las que inciden en la importancia de establecer criterios de eficiencia y equidad para ordenar la cartera de servicios, pero también en la necesidad de realizar evaluaciones económicas y análisis del impacto presupuestario.

En concreto, los expertos consideran que la eficiencia en el copago farmacéutico pasa por no distinguir entre trabajadores activos y pensionistas. De esta forma, los criterios diferenciales serían la renta y la condición de salud. El ex presidente de la asociación, Juan Oliva, propone que se aplique un copago similar al de otros países europeos, en los que se limita la cantidad anual máxima acumulada por cualquier copago sanitario a un porcentaje de la renta que varía entre un 1% o un 2%.

Otro aspecto importante es el de la modificación de los criterios de acceso a la cobertura sanitaria pública. En este caso, AES cree necesario eliminar el requisito de "residencia efectiva y autorizada en España" y sustituirlo por el de "residencia efectiva y prueba de insuficiencia de ingresos", como está regulado en otros países europeos.

Los economistas realizan más de 150 propuestas para reformar el sistema público, que según los expertos estará en declive “en los próximos cinco años”.