Fecha: 2017-2019
Ubicación: Calella, Barcelona
Autor: MIAS Architects
Fuente: MIAS Architects
Web: ver aquí
Colaboradores: Marc Subirana, Marta Cases, Maria Chiara Ziliani, Anna Rosell, Ilaria Egidi
Dirección de obra: Josep Miàs, Marc Subirana, Josep Domènech
Estructura: Windmill Engineering
Instalaciones: Proisotec
Cliente: Comunidad terapéutica del Maresme
Contratista: Fuset Roig Construccions, INSTA SAGMA 
Presupuesto: <450.000 €
Superficie: 884 m²
Fotografías: Del Rio Bani

El proyecto consiste en la reconversión de tres naves industriales en el centro urbano de Calella en un Centro de salud mental y  drogodependencias.

Estas naves  fueron construidas  a principios del siglo XX con  muros perimetrales portantes de ladrillo macizo, pilares de hierro fundido y forjados  compuestos de vigas metálicas en celosía y vigas de madera y revoltón cerámico.

El espacio  consiste en tres naves paralelas a la calle con cubiertas cerámicas de teja a dos aguas cada una de ellas.

La primera intervención es la unificación de las tres naves industriales en un único espacio tanto en el nivel inferior de acceso como en el primer piso por lo que se derriban los muros que las separan actualmente dejando libres los pilares centrales  de hierro fundido. Se  mantienen todos los  elementos estructurales, demoliendo el resto de construcciones interiores y compartimentaciones existentes, así como la escalera de acceso y edificaciones auxiliares.

La planta baja de acceso desde la calle se dedica a la salud mental. Se organiza a partir de un amplio espacio de entrada en el cual está la recepción principal. Este espacio  da acceso a una escalera con ascensor a un lado y a otra escalera al otro lado. Desde este espacio de bienvenida se organizan dos calles perpendiculares  a lo largo de las cuales  se disponen los consultorios y despachos del personal sanitario a modo de cubículos. Al final de estas calles se encuentran  los espacios más amplios de trabajo,  cocina y comedor, y de reunión de los trabajadores del centro.

En el nivel superior los dos núcleos de acceso dan a otro espacio de hall con recepción, del cual parten dos calles similares al nivel inferior. A lado y lado están el resto de despachos del personal y los espacios  de tratamiento de toxicomanías.

Todos los espacios del centro se construyen con unos elementos prefabricados de hormigón que enmarcan una superficie de cristal. Se utilizan dos tipos de prefabricados para construir estos muros interiores, de formas cuadradas y rectangulares, Estos prefabricados se habían utilizado antiguamente para hacer  ventanas únicamente en arquitectura agraria e industrial y se habían dejado de producir hace  ya bastantes  años. El uso de estos ha requerido la recuperación de moldes así como de la reactivación de una de las empresas que los fabricaba.

El espacio interior de estos elementos se cierra con una superficie de cristal. Esta tiene  distintos grados de transparencia de acuerdo con la necesidad de mayor o menor privacidad según el uso de estos. Si bien en general  los espacios disponen de techo  construido con una losa prefabricada de hormigón algunos se cierran superiormente usando la misma celosía con cristal.

A partir del uso de esta celosía se consigue un grado de transparencia en toda la planta, de manera que no existe ningún espacio sin una clara  relación con el resto del centro.

La idea de ventana , como elemento que define el proyecto se inicia con la abertura de unas grandes ventanas en las cubiertas a dos aguas existentes en  forma de lucernarios. Estas ventanas lucernario se construyen  como habitaciones suspendidas capaces de iluminar todo el nivel superior de forma generosa.

La misma escalera desarrolla la idea de habitación lucernario. Los requerimientos de aislamiento acústico así como  de sectorización  sugirieron la construcción de este espacio singular de acceso en forma de espacio lucernario que se pone en relación con el correspondiente espacio lucernario superior de cubierta.

 Si bien los cerramientos verticales se construyen con estos elementos de hormigón y cristal, los pavimentos también de hormigón pulido incorporan unas alfombras de mosaico hidráulico reciclado de la misma localidad. El resto de elementos de mobiliario y cerramiento se construyen con madera reciclada.

La fachada recupera la idea de ventana dentro de  la ventana, e incorpora los mismos elementos prefabricados en el interior de los huecos existentes  y extiende esta geometría al resto de aquella en forma de grafitti.

Galería de imágenes:

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