Entrevista a Marta Sanchez Bret de WeMind Clúster
¿Cómo definirías tu trayectoria hasta que llegaste a liderar WeMind Cluster?
Soy una persona con un conocimiento muy transversal. Estoy licenciada y tengo un máster en Ciencias Químicas. Mi experiencia profesional pasa por Corporate en empresas americanas con sede aquí, pero también fuera del país, en cargos internacionales.
He llevado una gran variedad de proyectos, desde gestión de cuentas, a programas de desarrollo, así como proyectos europeos en procesos de digitalización e integración de organizaciones.
Siempre he sido una persona a la que le ha gustado mucho mezclar conocimientos, áreas y hacer que las cosas pasen. En 2014 valoré la propuesta que surgió desde el Ajuntament de Sant Boi de Llobregat de crear un clúster.
Inicialmente surgió como un proyecto local con la necesidad de escribir un plan estratégico para entrar a formar parte del Programa Catalunya Clústers, un espacio con más de treinta años de existencia pensado para definir las estrategias que ayudan a las empresas a ser más competitivas, así como con la colaboración de ACCIÓ, la agencia pública para la competitividad de la empresa catalana, adscrita al Departament d’Empresa de la Generalitat de Catalunya, que también necesitaba aumentar su número de socios.
El proyecto del clúster nació como Clúster Salut Mental Catalunya con 22 socios fundadores y poco a poco fue creciendo en diferentes fases.
Primero hubo una etapa de ideación, seguidamente pensamos y constituimos el ideario, así como la misión, visión y valores y finalmente en 2015 el Ajuntament de Sant Boi de Llobregat nos cedió un espacio, el Palau de Marianao, que hoy en día seguimos manteniendo ya como WeMind Cluster.
Debido a la naturaleza de los proyectos iniciales que conformaron el clúster, junto con las tendencias de mercado y la evolución de la demanda, esta primera asociación estuvo muy versada en introducir la innovación como eje central de su identidad.
Eso sí, siempre desde una mirada biopsicosocial y pensando también en la competitividad de las empresas y la empleabilidad de este sector profesional y su excelencia.
Éramos conscientes de que aquello que impulsábamos suponía un beneficio para aquellas personas y familiares que tenían situaciones de dependencia o sufrían enfermedades.
Inicialmente nos centrábamos más en la vertiente relacionada con la salud mental desde una disciplina médica, pero después nos dimos cuenta de que todo lo que se podía hacer desde la psiquiatría tenía también una mirada holística hacia lo que biológicamente se definiría como sistema nervioso central.
Por lo tanto, observamos que también podíamos dar cabida a proyectos que acompañaban a todas las personas a lo largo de su ciclo de vida, desde la etapa prenatal hasta el final de la vida.
Así, vimos que podíamos abrir el abanico y dar cabida a una gran variedad de proyectos, por lo que tuvimos que cambiar el nombre de Clúster Salut Mental Catalunya a WeMind Cluster. Pensamos que este nombre sería el adecuado porque incluía una visión holística del cuidado. “We Mind” es lo que todos nuestros socios llevan en su corazón, que son las curas, las personas, desde un punto de vista más humanístico; pero también desde un punto de vista de querer incluir ese gran universo de conceptos relacionados con los cuidados, como son el envejecimiento y su relación con la longevidad, el bienestar de jóvenes y adolescentes, la salud mental en el trabajo e incluso las adicciones.
Hoy WeMind Cluster ofrece ese enfoque humanístico con el objetivo de cuidar a las personas en diferentes momentos de su vida gracias a la introducción de innovaciones que también repercuten positivamente en un aumento de la productividad de los diferentes sectores económicos implicados.
¿Cuál es la visión a largo plazo del Clúster? ¿Dónde te gustaría verlo dentro de cinco años?
Me gustaría encontrar una mayor representatividad de proyectos vinculados a la longevidad, que es una parte de los cuidados que pertenece a esta acción biopsicosocial sobre las personas, concretamente sobre las personas mayores, que son, en términos demográficos, un reto muy grande para la sociedad y que representativamente se separan de lo que son los cuidados en ámbitos clínicos y hospitalarios.
Esta integración socio comunitaria de una demografía cada vez más grande, como son las personas mayores, deseamos que se realice de forma sostenida, a través de un amplio espectro de soluciones muy susceptibles a la innovación.
Y es precisamente aquí donde podemos innovar trabajando con otros sectores. Hemos colaborado con arquitectos; con empresas del sector inmobiliario, buscando la manera en que los edificios puedan ser útiles para una mayor autonomía de las personas que los habitan; hemos trabajado con el Clúster de la Nutrición, por ejemplo, para ver cuáles son las claves del envejecimiento saludable a través de la parte nutricional de la ingesta, de cómo la microbiota puede dar resultados positivos en el proceso de hacerse mayor; hemos colaborado también con el INDESCAT, Clúster de l’Esport, para ver cómo la actividad física puede redundar en una mayor longevidad.
Finalmente, todo ello, tiene de forma transversal la incidencia de lo digital, que permite atender todas estas dimensiones con facilidad, ofreciendo una respuesta en ocasiones más humana, más socio comunitaria, pero también con un importante componente de automatización, a través de la monitorización, las videoconferencias, la telemedicina, y el apoyo remoto.
De ahí surge con fuerza el concepto de WeMind, porque la filosofía que deseamos impulsar es la autonomía personal a lo largo del ciclo de vida de las personas, pensando que la innovación debe ser humanística, tecnológica y útil a los usuarios, pero también a la sociedad.
¿Qué rol juega Qualud como partner dentro de WeMind Cluster?
Muchas veces decimos que dentro del clúster tenemos socios estrella, que nacen en un contexto de mercado en el que existe una demanda que no está cubierta, y que tienen la capacidad de realizar un cambio estratégico, de aplicar las competencias y los conocimientos de los que disponen y ponerlos a disposición de esa demanda no satisfecha.
Uno de estos socios estrella es Qualud: una de esas pequeñas startups que ha sabido crecer y comprender de dónde venía, qué mercados debían explorarse y que ha sabido dar una respuesta en tiempo y producto muy adecuada.
Y precisamente esa capacidad de saber hacerlo, creo que los convierte en un referente en la transformación digital en el sector de la salud, concretamente en proyectos de salud mental y longevidad, resaltando, por ejemplo, Kala, la primera app dedicada al acompañamiento integral de la mujer en la transición a la menopausia.
En definitiva, han trabajado estratégicamente en nichos de mercado en los que no existía ninguna solución y han sabido estructurar sus proyectos con colaboración público-privada porque siempre han trabajado junto con instituciones públicas y privadas, universidades, y a partir de aquí siempre han sabido construir una respuesta colectiva útil para la sociedad.
Para seguir leyendo este artículo debe iniciar sesión o darse de alta en el portal.
Para poder escribir un comentario debe iniciar sesión o darse de alta en el portal.