El pasado 15 de junio tuvo lugar la rueda de prensa para la presentación de la segunda fase de ampliación y reforma del Hospital del Mar de Barcelona. Esta segunda fase de transformación ha sido realizada a partir de un proceso de cocreación entre los pacientes, familiares, profesionales del hospital y arquitectos con el objetivo de crear un modelo de hospital centrado en la experiencia de las personas. El proceso de cocreación ha permitido tener una mayor sensibilidad para el diseño de los nuevos espacios gracias a la participación. El resultado han sido espacios confortables con un acabado doméstico. Otro aspecto fundamental en esta transformación ha sido el tratamiento de las cubiertas, se han convertido estos espacios normalmente tecnificados en espacio ajardinados al aire libre. Gracias a ello se ha podido desarrollar un gran jardín terapéutico, con plantas medicinales.

Los espacios técnicos, así como quirófanos y UCIs eran concebidos por el usuario como espacios oscuros, por lo que hemos intentado que los nuevos quirófanos, así como la UCI sean espacios que puedan contar con luz natural, en la medida de lo posible, y con una buena calidad espacial en cuanto a materiales utilizados e iluminación artificial.

El proyecto ha sido desarrollado por Pinearq y Brullet de Luna. El nuevo edificio de esta segunda fase de ampliación contará con 30.000 ² de superficie y 180 camas de hospitalización, además de 4 quirófanos, uno de ellos híbrido. El edificio albergará un área materno-infantil con habitaciones individuales, terraza ajardinada, aplicación de la farmacia, el traslado de instituto oftalmológico, nueva área de endoscopia y consultas.

Desde el inicio del proceso de diseño se ha utilizado la metodología BIM, además de la interrelación de sensores ambientales y de tecnología IoT para la obtención de datos que permitan mejorar los flujos y los procesos e implementar un sistema de información sobre los espacios en tiempo real.

El hospital busca la alta sostenibilidad y la eficiencia energética. Por ello que propone la optimización de materiales y residuos, así como la apuesta por un sistema de economía circular. Las cubiertas ajardinadas, las placas fotovoltaicas y las lamas de protección solar, serán algunas de las herramientas que hagan posible esta sostenibilidad. Además, de herramientas tecnologías que controlaran el consumo energético a través de sensores de ocupación.

Las habitaciones se equiparán con tecnología domótica para asegurar más confortabilidad al paciente y un seguimiento más controlado por parte del personal médico. Por otra parte, el hospital contará con tecnología 5G, herramientas de realidad virtual y realidad aumentada.

Por último, enfatizar la importancia de diseñar un hospital resiliente, incorporando criterios de flexibilidad, adaptación de espacios y separación de circuitos. Para ello, las unidades de hospitalización y las UCIs serán polivalentes y transformables en circunstancias cambiantes.