Espace 313 presenta su moderna reinvención de un centro quirúrgico situado en Westmount Square, un edificio diseñado por Mies van der Rohe en la década de 1960 en Montreal (Canadá). Centrado en maximizar la luz natural y utilizar materiales suaves y naturales, el proyecto gira en torno a la experiencia humana y el bienestar.

Durante muchos años, los hospitales y las clínicas médicas se diseñaron y construyeron buscando la máxima eficiencia, descuidando a menudo los factores humanos y estéticos del entorno. No fue hasta la década de 1990, tras numerosos estudios que demostraban el impacto del entorno en el comportamiento de los pacientes, cuando las consideraciones estéticas en los entornos sanitarios se convirtieron en una verdadera preocupación para los profesionales del diseño.

El estudio de interiorismo Espace 313 recibió el encargo de reestructurar y renovar por completo las instalaciones de una clínica quirúrgica privada de 2.000 metros cuadrados situada en el centro de Montreal. El estudio abordó el encargo con una preocupación primordial: ¿cómo alejarse de la atmósfera fría y estéril que tan a menudo se asocia a los entornos hospitalarios?

La luz como conductor

Situando el factor humano en el centro de su proceso creativo, la propuesta de diseño de la empresa plantea opciones funcionales y estéticas destinadas a influir positivamente en el comportamiento tanto de los pacientes como del personal. La distribución del espacio se diseñó inicialmente para aprovechar la abundante luz natural disponible en el espacio. Como resultado, la mayoría de las habitaciones no dependen de la luz artificial para la iluminación diurna, y se instalaron numerosos tabiques acristalados con el objetivo de difundir la mayor cantidad posible de luz natural en el corazón del edificio. En las zonas donde no fue posible, las salas se iluminaron con una luz suave y cálida, una elección deliberada que contrasta con la iluminación fría y estéril que suele darse en los entornos sanitarios.

El usuario en el centro del proceso creativo

Utilizando nociones de psicología ambiental para determinar las características de cada elemento del espacio, los diseñadores se propusieron crear una experiencia única que ayudara a visitantes y pacientes a gestionar mejor el estrés asociado a un procedimiento médico importante. Como punto de partida, los diseñadores utilizaron el principio de conexión con la naturaleza para desarrollar el resto del concepto.

"Había un fuerte deseo de llevar las ideas más allá de lo que hemos visto en el diseño sanitario en los últimos años, con el objetivo de que los pacientes se sintieran cómodos de inmediato", dijo Gatline Artis, propietaria de Espace 313. "Esto se consiguió con una paleta de colores suaves y terrosos, volúmenes curvos y materiales naturales que evocan la estética residencial. La vegetación también desempeña un papel importante, ya que crea una conexión con el aire libre y la naturaleza, que son bien conocidos por inducir una sensación de relajación en los usuarios."

Inspirado en el cuerpo humano

Los espacios de la zona administrativa, como la recepción, las salas de consulta y los despachos, se inspiran directamente en la estética y la suavidad del cuerpo humano, tanto en sus curvas, colores y texturas como en sus imperfecciones.

Esto incluye el uso de acabados murales de yeso falso, realizados por un artesano local, que aportan una cualidad visual suave, frágil e imperfecta, yuxtapuesta a paredes de ladrillo de terracota que contrastan en color, porosidad y dureza del material. El uso de muebles de líneas orgánicas y la omnipresencia de textiles sobrios y de aspecto natural contrastan también con otros elementos más fríos, como el mostrador de recepción metálico de color champán.

Uno de los principales retos del proyecto era trasladar la estética de la zona administrativa a las salas de consulta y las zonas pre y postoperatorias. Estos espacios requieren materiales y equipos especializados que rara vez se ajustan a la sofisticada estética que aquí se busca. El equipo del Espace 313 llevó a cabo una investigación exhaustiva para reducir las diferencias de ambiente entre estas zonas y conseguir una atmósfera homogénea en todo el espacio. Ese empeño se refleja en el uso de materiales de alto rendimiento, pero con un aire residencial: acabados de efecto madera, tejidos de imitación de lino, vegetación artificial y mucho más.

La atención al detalle se extiende a las instalaciones sanitarias, donde no se ha pasado por alto ningún aspecto estético. Los materiales y la iluminación se han seleccionado cuidadosamente para garantizar que los pacientes se sientan cómodos y a gusto en cada momento de su estancia.

Con esta propuesta conceptual, Espace 313 da una nueva mirada al diseño hospitalario y ofrece una visión única de la clínica médica del mañana, donde la estética y la calidez conviven con la salud y el entorno hospitalario.

Datos del proyecto

Ubicación: Westmount, QC, Canadá

Estudio: Espace 313

Equipo de diseñadores: Debby Pagé, Gatline Artis y Kelian Vallier

Proveedores: Slik Design, Decor Veronneau, Ramacieri Soligo, Studio Bottè, Bludot, Gauley Brothers, Distrimar, Artopex, Cime, AND Light, Jacques & Anna

Superficie: 7850 sq.ft.

Año: 2022

Fotografias: Maxime Brouillet

Premios: Certificación de oro en el Grands Prix du Design - 16ª edición

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