Durante la segunda quincena del mes próximo, el hospital Miguel Servet de Zaragoza estrenará la mitad de sus nuevos quirófanos, ubicados en el edificio Multifuncional. La empresa constructora ha entregado ya al Salud 12 de las 24 salas de intervención y la mitad de las ucis (24 boxes), que entrarán en funcionamiento cuando estén totalmente concluidas. Aunque los plazos no se han movido demasiado respecto a las previsiones iniciales, finalmente las nuevas instalaciones no se podrán inaugurar antes de las elecciones, tal y como estaba previsto. Junio será el punto de partida para que progresivamente se vayan abriendo las nuevas áreas del hospital y para que el centro sanitario comience a mostrar su nueva cara. Tras las ucis y los quirófanos le tocará el turno a la parte del servicio de Urgencias que todavía estaba en obras, en junio; y al edificio de consultas externas, en octubre. Antes del verano comenzará a regresar al centro el personal sanitario de Traumatología (más de 350 personas) que se había trasladado a la MAZ, al hospital Militar y el Clínico. Tras las vacaciones, volverán los que prestaban asistencia en el Royo Villanova. OBRAS A BUEN RITMO Para comprobar los avances en los trabajos, el presidente del Gobierno aragonés, Marcelino Iglesias, acudió ayer al Servet, acompañado por la consejera de Salud, Luisa María Noeno. "Esta reforma supone un salto adelante muy importante, aunque en salud nunca llegamos al final. Cuantos más servicios damos, más demanda generamos", indicó el líder del Ejecutivo. Junto al gerente del Salud, Antonio Brun, y al equipo directivo del hospital, recorrieron una parte del edificio Multifuncional, de nueva construcción y al que se accede por la calle Calamita, en el que están ubicados tanto el bloque quirúrgico, con 24 quirófanos; y las ucis, con 48 boxes individuales. Las nuevas instalaciones cuentan con los últimos adelantos tecnológicos, pero también se ha procurado incrementar el nivel de confort del paciente. Cuidados
También están listas la mitad de las ucis y la última planta de Traumatología. Antes del verano comenzará el regreso del personal que había sido trasladado.
Intensivos pasará de las 40 camas actuales a 48 cuando finalicen las obras. Las nuevas ucis disponen de boxes individuales para pacientes (hasta ahora eran salas abiertas) y luz natural en todos ellos; salas de espera para familiares (con sillones reclinables, reposapiés y taquillas con llave para guardar efectos personales) y despachos de información. Cada uno de estos boxes tiene monitorización individualizada y terminales de ordenador para la captura de datos desde la historia clínica del paciente y para visualizar el resultado de pruebas diagnósticas en tiempo real. Asimismo, el ordenador tiene acceso a internet, lo que facilitará el intercambio de información y la consulta entre los médicos. Respecto a los quirófanos, tras la reforma el bloque quirúrgico se unificará en el edificio Multifuncional, pasando la superficie total de este área de 4. 500 metros cuadrados a 6. 000. Las nuevas instalaciones permiten incrementar la calidad del entorno microbiológico del paciente con filtros absolutamente individualizados para cada quirófano. También se han concluido ya las obras del hospital de Traumatología. La planta baja, la última que quedaba por remodelar, ya está lista para su uso, aunque todavía no hay fecha específica para la inauguración de la misma. Está dedicada a los lesionados medulares, que contarán con 19 habitaciones especialmente adaptadas y con una gran terraza. (Red Aragón)