El agua, desde su entrada a los aljibes del Hospital hasta su salida por el alcantarillado, es conducido tratado, transformado y utilizado para cubrir las necesidades de los pacientes del Hospital. Para ello recibe diversos tratamientos, tanto químicos como térmicos, (en este último caso hasta el punto de cambiar de estado). Unas veces para proteger a los pacientes que entran en contacto con él, como es el caso de la cloración para consumo humano y cocinas, la ósmosis inversa para diálisis, o el tratamiento de legionella en los circuitos de A.C.S. y enfriadoras. Otras veces los tratamientos del agua van encaminados a la protección de la propia instalación, como es la producción de vapor o climatización. En ocasiones el agua nos sirve como medio de transporte en la evacuación a alcantarillado de los desechos del Hospital. Otras veces el agua es el transmisor de energía, como el vapor que alimenta el lavadero. En otras es un elemento fundamental en la desinfección de los autoclaves. Como vemos son muchos y variados los usos y tratamientos a los que se le somete para una mejor puesta al servicio de los pacientes. En “El agua al servicio de los pacientes del Hospital” se hará un desarrollo exhaustivo de estos circuitos y la reglamentación que los regula, desde el punto de vista del mantenimiento. Comenzando por la cloración en los aljibes. Continuaremos con los tratamientos que recibe para convertirse en transmisor de energía en forma de agua de climatización, A.C.S. y vapor. Seguidamente las instalaciones de tratamiento de agua que entrará en contacto con los pacientes: ósmosis inversa para diálisis. Proceso de vital importancia dentro del Hospital. Por último el agua como medio de transporte de los deshechos del hospital que podemos eliminar sin más al medio ambiente.

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