El Diseño para el nuevo Hospital del Trabajador de la Asociación Chilena de Seguridad implica un desafío complejo debido a la necesidad de mantener su operación mientras se realizan obras nuevas y de renovación profundas en un hospital en funcionamiento.

Desde el inicio del Diseño se planteó como objetivo principal el diseñar un entorno para sanar y rehabilitar centrado en el paciente y sus familias.

Así mismo, es indudable que la vocación netamente urbana de su emplazamiento, así como la presencia de edificios de un importante valor arquitectónico delinearon una solución que principalmente se centro en conectar sus esquinas principales, Vicuña Mackenna y Ramon Carnicer, con el eco atrium mediante una calle interior rescatando así la fachada Interior del edificio que corre por avenida Francisco de Bilbao.

En términos programaticos se consolidó el programa de rehabilitación en el primer nivel, aprovechando la exposición y presencia del mismo ya sea hacia la ciudad como al interior del campus clínico.

La expansión en el número de camas, pabellones y Boxes de Urgencia (270, 14 y 40 respectivamente) se resolvió en dos edificios que se desarrollan en el perímetro e interior del terreno conectados mediante circulaciones independientes a un Lobby o Eco Atrium que funciona como corazón del proyecto. Los servicios de Atención ambulatoria se mantienen en edificios existentes contemplando una renovación en el estándar interior de los mismos. En el subsuelo se resolvió en 5 niveles la urgencia, imagenologia, central de procesos, estacionamiento y areas de soporte.

La navegación o Wayfinding se resuelve desde la proximidad al campus mediante una clara identificación de los ingresos al mismo ya sea a su area de Urgencias como a los accesos principales. El Eco Atrium, resuelve todas las conexiones principales a los edificios nuevos como a los existentes en un espacio significativo en su escala, luminosidad y especialidad.

En el centro del campus se libera un gran patio o Healing Garden el cual permite la incorporación de luz natural a la mayoría de los recintos y un area verde que además funciona como zona terapéutica para los pacientes en rehabilitación. En este patio, destaca una gran rampa que permite la conexión del area central con el jardín espiritual en donde se emplaza el oratorio.

Con respecto a la respuesta del campus con el medio ambiente, se diseño un sistema de manejo energético pasivo como apoyo a sistemas mecánicos en donde el Eco Atrium funciona como acumulador de calor en invierno (Heat Stack) y como regulador de temperatura en verano. La envolvente de los edificios propone un sistema de aletas de cristal cerigrafiado que previo mapeo de la fachada se localizan de manera tal de manejar la radiación e iluminación de cada fachada.

Con respecto a la creación de un entorno para sanar y rehabilitar, trabajamos con nuestros especialistas americanos en la conceptualización y propuesta de una arquitectura interior que propone materiales, colores y soluciones planimétricas acordes.

En definitiva, el nuevo Hospital del Trabajador se materializará en una infraestructura para sanar y rehabilitar, que ofrecerá un nuevo estándar espacial y ambiental para este tipo de pacientes, sus familias y quienes trabajan en ella

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