Fecha: Enero 2020
Idioma: Castellano
Procedencia: Diari de Tarragona
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Hace justo un año, la Generalitat de Catalunya hacia público el proyecto ganador para la construcción del nuevo hospital para la ciudad de Tarragona. La propuesta Entre Places, realizada conjuntamente por tres estudios de arquitectura – Sanabria&Planas-Gallego Arquitectos, CDB Arquitectura, Mario Corea Arquitectura – quedó en primer lugar en el concurso de ideas para la redacción del proyecto y la dirección de obra del futuro centro sanitario.

La idea inicial es derruir aquellos edificios que estén prácticamente obsoletos y construir uno de nuevo. Los edificios que no se demolerán serán, donde actualmente están ubicadas Urgencias y el Sociosanitario Francolí donde también se encuentra el CAP Tarraco.

El plan incluye un nuevo edificio de 40.000 m², que acogerá la hospitalización, el bloque quirúrgico y los servicios de soporte clínico. Además contará con los despachos, las oficinas, la cocina y la lavandería. El inmueble tendrá siete plantas, 16 quirófanos y 245 camas de hospitalización.

Según los arquitectos, el bloque central comunicará con el de las Urgencias, a través de un edificio puente, también de siete plantas. Esta construcción albergará algunos despachos médicos y tendrá 10 metros de ancho y 20 de profundidad. El objetivo es que los servicios dejen de estar desperdigados, como lo están ahora.

El proyecto cuenta con un presupuesto de 48,5 millones de euros, previstos en el Pla Econòmic i Financer d’Infrasestructures, aprobado en junio de 2018. La cantidad económica está «garantizada», según la Generalitat, ya que no se ve afectada por la prórroga presupuestaria.

Actualmente, los arquitectos están redactando el proyecto, que será entregado definitivamente en abril de este año, coincidiendo con que se cumple un año desde que se firmó la adjudicación. Los trabajos empezarán a mediados de este año y se alargarán durante un período de tres años. En el 2023, Tarragona tendrá un nuevo Hospital Joan XXIII. Entonces será el turno de las siguientes fases.

En la segunda etapa se derruirán los edificios existentes, como el principal y donde hay las consultas externas. En este mismo período, se levantará un nuevo edificio para despachos y se ampliará la cafetería. Finalmente, en la tercera fase se construirán los edificios referentes a la docencia y a la investigación. Está previsto que el nuevo complejo esté totalmente listo en 2025. Pero cabe recordar que estas dos últimas fases todavía no cuentan con la partida presupuestaria.