La nueva área quirúrgica de Oftalmología se sitúa en la planta primera del edificio de la Maternidad, catalogado y con una estructura existente a la que no se le pueden realizar muchas afectaciones. El proyecto ocupa una superficie de 900 m² y dispone de 3 áreas diferenciadas: el área quirúrgica, la administrativa y médica, y el Clinic Eye Training Center.

El área quirúrgica alberga cuatro quirófanos con la tecnología más puntera que permite realizar distintos tipos de operaciones, y un área polivalente de preparación y recuperación de los pacientes. El espacio se vertebra por el pasillo limpio central, desde donde se accede a los quirófanos y áreas de pacientes, así como las áreas de soporte necesarias del bloque quirúrgico. Desde el acceso principal se accede a los vestuarios de pacientes o al pasillo sucio de asistenciales y soporte, y a través de espacios de transfer se entra a la zona limpia quirúrgica. El área administrativa y médica queda separada del área quirúrgica logrando un funcionamiento independiente.

Ha sido necesario realizar un estudio preciso de los recorridos dentro del espacio quirúrgico para optimizar los espacios, evitar cruces y ser el máximo de respetuosos con la estructura existente. La complejidad del proyecto en todos sus aspectos nos ha hecho trabajar de forma multidisciplinar, adaptándonos a las necesidades de cada una de las disciplinas, llegando a hacer realidad un proyecto estratégico para el Hospital Clínic de Barcelona.

Los pacientes llegan por los vestuarios-transfer, y una vez dentro del área quirúrgica se les acompaña hasta la zona de preparación. Tanto esta zona como todo el pasillo limpio dispone de vistas al exterior y mucha luz natural, ayudando en la orientación y la conexión con el exterior.

Los quirófanos, de unos 35m² aproximadamente, se han diseñado con unas dobles paredes para ubicar el retorno de la climatización por su interior, realizado a través de una reja por la parte inferior del doble tabique. De esta forma se evitan las esquinas a 45º y se optimiza el espacio quirúrgico. Los revestimientos son de cristal laminado opal, dónde también se integran los monitores de alta definición, y de paneles de solid surface en las zonas de trabajo de anestesia y enfermería para poder integrar todos los elementos y displays que requieren más mantenimiento.

Todo el bloque quirúrgico dispone de puertas estancas y herméticas según las necesidades de cambio de presiones entre espacios. Para las puertas de los quirófanos, se ha optado por una mirilla de forma orgánica para seguir con las formas más suaves de todo el espacio. Esto, ligada a las entradas con una pared en diagonal, ayudan a la movilidad de las personas y evitan rincones sin visibilidad.

El proyecto arquitectónico se basa en conceptos propios de la neuroarquitectura, buscando los mejores espacios para las personas usuarias, teniendo en cuenta que el entorno que creamos influye en su estado de ánimo y su comportamiento. El proyecto busca el bienestar de los pacientes y asistenciales trabajando en diversos puntos de diseño.

Nuestro organismo necesita el contacto directo con la naturaleza, por eso es necesario llevar el mundo natural dentro de los espacios interiores. Los espacios se abren a la luz natural, que regula nuestro biorritmo y a las vistas al exterior. Los materiales como la madera, los colores naturales y las fotografías terapéuticas crean una atmósfera confortable, con espacios amplios y luminosos que fomentan la calma y la concentración. Para las personas pacientes es importante que su estado de nerviosismo y angustia no se incremente al entrar en el espacio quirúrgico, y para el personal es importante tener una referencia del mundo exterior entre las intervenciones en espacios cerrados y oscuros (quirófanos).

Las fotografías de los espacios comunes (pasillo limpio y zonas de pre y post anestesia) son de paisajes de mar con un horizonte claro. Este tipo de imágenes evocan libertad y tranquilidad, conectando con pensamientos positivos. En los quirófanos se han escogido unas imágenes de cuatro iris, que son de personas del mismo servicio que han querido formar parte de este proyecto.

Los colores mezclan la madera tipo roble con una gama de colores naturales, combinando el blanco con colores grises, marrones, piedra, buscando un equilibrio de contrastes. Para los quirófanos se escogieron 4 colores que van ligados al color del iris de la pared (azul, marrón, verde y marrón-verde). De esta forma cada quirófano se identifica por su color.

Las formas de los cierres y de los revestimientos son curvas y suaves, evitando activar la amígdala, que es la causante del miedo y la angustia. No queremos generar un estado de alerta, sino que el espacio abrace a las personas que no usan, que los contenga, dé calma y reduzca el estrés y el nerviosismo. Por eso evitamos ángulos rectos y formas agresivas en los espacios donde podemos intervenir, suavizando los contornos.

Hemos desarrollado un relato con la señalética y las fotografías terapéuticas en todo el recorrido de pacientes. Se sigue una secuencia que permite tener el espacio controlado, con referencias que se van repitiendo para no perder la orientación del espacio y el tiempo. Con estas actuaciones buscamos el bienestar y la comodidad, fomentando la apropiación del espacio.

La dignidad y la privacidad de las personas son prioritarios, diseñando espacios de espera adecuados para preservar la intimidad en todo momento, y tener unos espacios amigables y confortables que lleven hacia una calma y serenidad. Es necesario gestionar el estrés que provoca estar pasando por una cirugía ocular y el control del espacio es importante.

El Clinic Eye Training Center completa el proyecto del Instituto Clínico de Oftalmología, dotando de un espacio de formación indispensable para seguir avanzando en la investigación y poder ser referente en su especialidad. Este espacio está formado por despachos, un aula de formación y una sala laboratorio con capacidad para 8 microscopio desde dónde se pueden realizar todo tipo de sesiones.

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