La unidad de salud Argoncilhe se localiza en un área poco urbanizada, predominantemente residencial y en las inmediaciones de la Escuela Básica 2/3 de Argoncilhe.

A la hora de diseñar el proyecto, uno de los factores claves fue el terreno que presentaba una inclinación descendente en el sentido suroeste/nordeste. Esta pendiente permitió materializar la idea de un edificio suspendido sobre el terreno, manteniendo las vistas privilegiadas a las zonas verdes envolventes, para garantizar así la privacidad de todos los gabinetes.

La orientación este/oeste del edificio tiene ventajas a la hora de aprovechar el solar, permitiendo crear dos fachadas distintas con exposición norte y sur.

Funcionalmente, el edificio se desarrolla en sentido Este/Oeste a partir de una zona de espera y admisión, donde se controlará y encaminará a los pacientes a las consultas, enfermería o salas de tratamiento. 

En la planta inferior se sitúan las áreas técnicas, de apoyo, suministros, vestuários, sala de reuniones y la entrada de servicio. Esta organización permite la separación entre el acceso público, y el uso reservado a personal.

La estructura funcional y constructiva permite la ampliación del edificio en un futuro, para poder responder a futuro aumento de la población a asistir. Esa ampliación tendrá costes muy reducidos, ya que se aprovecharán la estructura y parte de las instalciones proyectadas.

En el diseño del edificio una particular preocupación de minimizar el impacto visual en el entorno. Por eso los paneles solare y las instalaciones de climatización quedaron concentrados en un área abierta adyacente al edificio

Todo el edificio es de hormigón a la vista, con una protección frontal de rejilla metálica perforada que "filtra" el exceso de luz, y el norte consiste en una fachada continua de U-Glass con buena iluminación natural

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