Los materiales que construyen un edificio y la propia materialización de ese edificio son los dos temas que nos ocupan en este texto. Por un lado, creemos necesario apostar por un proceso de valoración real de los materiales necesarios para la materialización de una construcción. No basta con evaluar el consumo del edificio: es fundamental conocer el funcionamiento y el consumo de cada material escogido. Y, por otro lado, la materialización es la construcción material de ese proyecto arquitectónico que, en un momento como el actual, viene definida por la rapidez, la prefabricación y la optimización de los procesos.

1. La elección de los materiales

Nos hemos acostumbrado a revisar la vida útil de los materiales que escogemos para construir cualquier edificio. En el caso de los hospitales, se buscan materiales que cumplan con características específicas, pero, sobre todo, que tengan un excelente comportamiento en el tiempo de vida del edificio. Además, existen certificados internacionales que valoran la calidad ambiental de la totalidad de las construcciones.

Se hacen necesarios y fundamentales mecanismos de evaluación del impacto ambiental y el consumo cero de los propios materiales, individualmente y en conjunto. Estas valoraciones deberían incluir, igualmente, la procedencia de esos materiales con el fin de garantizar la proximidad de los escogidos.

- Enfoque tradicional: Como venimos exponiendo, la escogencia de materiales, en general, se rige por estos factores: funcionalidad, atributos estéticos, calidades ambientales, durabilidad y confort. Se buscan materiales de altas prestaciones porque las exigencias son elevadas: prima la conservación en el tiempo, durante el uso del edificio. En este sentido, se reclama la optimización en el uso: limpieza, asepsia, resistencia mecánica, al fuego, al desgaste. En este enfoque, la selección se produce con base en la experiencia y en la garantía ofrecida por los propios fabricantes.

- Enfoque evolutivo: En este mundo que cambia más rápido que el sector de la construcción, debemos estar alineados porque el cambio es importante y beneficioso. Los factores para escoger esos materiales ideales para la creación definitiva del proyecto se orientan hacia la clasificación específica de cada elemento, su calidad ambiental y su consumo individual. Así, este enfoque puede relacionarse de esta manera: