Tras 18 años de vigencia del Real Decreto 865/2003, por el que se establecían los criterios higiénico-sanitarios para la prevención y control de la legionelosis en España, ahora está a punto de entrar en vigor (el 2 de enero de 2023) el Real Decreto 487/2022, del 21 de junio de 2022, que plantea actualizaciones y mejoras técnicas respecto con la anterior normativa, así como nuevas medidas de gestión del riesgo de legionelosis e innovaciones necesarias para un mayor control de las instalaciones o equipos.

Una de las novedades incluidas en este RD es la obligación de implementar en edificios prioritarios un Plan de Prevención y Control de Legionella (PPCL), que debe incluir un diagnóstico inicial de la instalación, un programa de mantenimiento y revisión de la instalación y los equipos, y los registros que plasmen las tareas de control y mantenimiento incluidos en los programas.

Los hospitales y clínicas, entre otros, como edificios prioritarios, tendrán que aplicar de manera obligada este RD, al ser instalaciones susceptibles de convertirse en focos de exposición humana a la bacteria y de propagación de legionelosis, por lo que deberán elaborar un PPCL, que se podrá completar de forma voluntaria con un Plan Sanitario frente a la Legionella (PSL), que se basará en las recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud (OMS).

¿Qué baremo se ha establecido para la obligatoriedad de realizar un Plan de Prevención y Control de Legionella (PPCL) o un Plan Sanitario frente a la Legionella (PSL)?

Se aplicará en hospitales y clínicas a partir de 150 camas y aquellos que tengan unidades de cuidados aumentados.

Se establecen hasta 15 tipos de instalaciones, sin diferenciación alguna entre ellas, entre las que destacan y que se encuentran en un edificio sanitario:

1. Instalaciones de sistemas de agua sanitaria
2. Torres de refrigeración y condensadores evaporativos
3. Equipos de enfriamiento evaporativo
4. Humidificadores
5. Sistemas de agua contra incendios